Domingo XXI Durante el Año. (Mt.16,13-20).
Jesús dedico mucho tiempo a sus Apóstoles y tener con ellos un dialogo profundo e intimo. En esta oportunidad les pregunta “¿Qué dice la gente sobre el Hijo del Hombre?” vale decir sobre sí mismo. Dieron a luz varias versiones desde ser Juan Bautista hasta Elías u otro profeta. Todas las versiones eran de una consideración de ser una persona única y relevante. Pedro no revelado “por la carne ni sangre, sino Mi Padre que está en el cielo”, dice un misterio que a ellos mismo superaba: “TU ERES EL MESIAS, EL HIJO DE DIOS VIVO”.
Con el tiempo este “Misterio de Fe” comenzó a cuestionarse o interpretarse de diversas maneras hasta que en un Concilio (Nicea, año 350) se elaboró la formula que se reza en el Credo Niceno Constantinopolitano. Pero siempre el Dogma se elabora con una visión filosófica –Teológica determinada, que en verdad es elaboración en lenguaje humano. El misterio sigue y seguirá siendo Misterio, se trata de hacerlo mas racional. El Misterio nos sigue superando y seguirá superando el lenguaje del hombre que con el tiempo cambia de sentido.
Cuantas definiciones sobre Dios mismo se elabora en las distintas culturas, dando tantas religiones como culturas existentes. El Dios revelado por Jesús es Trinitario: Padre, Hijo y Espíritu Santo. El Padre no por ser varón, dejando de lado a la mujer, hoy se busca decir Padre-Madre, pero seguimos dándole un sexo a Dios. Desde las antiguas filosofías dieron definiciones distintas sobre Dios. Jesús nos da una visión judía y muy personal de un Dios que es ABBA, Padre de una manera tan personalizada y hasta cariñosa. A Dios lo hemos dibujado como un viejo barbudo, sin embargo es eterno y siempre estable en su ser, digamos joven, no envejece ni tiene sexo. No tiene ojos y ve, no tiene oídos y oye, no tiene boca y se da conocer y entender, todo lo que a nosotros nos sirve para comunicarnos y relacionarnos con la creación El lo tiene de una manera Misteriosa, es DIOS.
Ser HIJO DE DIOS no nos dice que salió engendrado como un hijo de una mujer. Es un misterio que se busca describirlo de una manera y lenguaje humano: salido de Dios mismo. Dios hecho hombre. Este descubrimiento nos llevó a adorarlo y girar toda la devoción y actividades religiosas alrededor de esta verdad, adorarlo sobre todo y elaborar ritos que nos faciliten esa relación. ¿Será esto lo que buscaba Jesús ? ¿Revelando su Misterio de ser el Hijo de Dios? O es mostrar que de esa relación surge SU MENSAJE DE VIDA, su Proyecto para la Vida del hombre, esta debe ser escuchada y asumida con todo el ser, por ser la Voz del Creador, revelado como Padre Bondadoso y Misericordioso. Dios desea lo mejor para el hombre desde la Creación y como Redención. Si es Hijo de Dios ¿acepto con seriedad su mensaje de vida?.Seremos ortodoxos, no por relatar y defender la verdad dogmatica sobre Jesús, sino por llevar adelante su gran verdad de las OBRAS DE MISERICORDIA. El se vio identificado en otros hombres, sobre todo en los necesitados de salud, liberación, hambre, desnudez y otras necesidades básicas, que se viven en todos los tiempos y lugares. Jesús al revelarse lo hizo para que atendiéramos y cuidáramos sus Palabras de Vida. San Juan en su primera carta (2,9-10;cfr. Ss.) manifiesta que todo gira en el ‘AMAR AL PRÓJIMO COMO A SÍ MISMO’. Es el Camino de la Luz, llegar a la plenitud de ser también nosotros hijos de Dios ”queridos míos, desde ahora somos hijos de Dios y lo que seremos no se ha manifestado todavía. Sabemos que cuando se manifieste, seremos semejantes a Él porque lo veremos tal cual es” (3,2).
“Señor Jesús tu encarnación nos ha traído la esperanza de que todo lo humano es querido por Tu Padre Eterno. Nos has manifestado que el amor al prójimo y vivir con dignidad es el Camino hacia la eternidad”.