7° Domingo Durante el Año. (Mt. 5,38-48).
Este Domingo Jesús nos hace mirar a los hombres, aún los pecadores, aún aquellos que nos hacen daño, desde el modo de un Dios revelado por El, un Dios que es Padre-Madre Misericordioso. No es avalar el mal o daño que se realiza, sino mirando al agresor desde Alguien que es Amor y Vida y no puede ir contra su Ser. Su Amor trasmite la Vida y no puede desear el mal y la muerte de nadie. ¿Como entender humanamente a Alguien que nos dice amar al enemigo y hacer el bien a aquel que nos ha dañado? En mis primeros años de sacerdote uno de mis destinos fue ser secretario del Obispo, época difícil, lucha de la guerrilla y las fuerzas militares. Donde se habla de los desaparecidos pero que también había asesinatos de militares y familiares como asalto a Centros Militares. En una oportunidad se presentó una señora, madre de una joven presa que pedía por la libertad de su hija. El Obispo consiguió liberarla ... no había pasado un mes y a la joven la encuentro en una lista de muertos en el asalto a "La Tablada" Centro Militar. A los pocos días nos visitó al obispado y le comenté con dolor: "si su hija hubiera estado presa hoy no estaba muerta". Ella me respondió :"soy la madre y deseaba lo mejor para ella, su libertad".Me dí cuenta lo que una madre es capaz de hacer por un hijo. De allí entendí todo lo que Dios como Padre- Madre es capaz de esperar del hombre, siempre con esperanza de que sea mejor persona, capaz de cuidar la vida de los demás y del planeta como su hábitat, pero que también respeta su libertad. Cuando Jesús nos pide amar al enemigo lo desea desde una mirada de Dios que es Padre y Madre. Espera y confía en el hombre un cambio de actitud y desea lo mejor de él para edificar un mundo en paz, armonía, equilibrado, justo y misericordioso. Ante el mal que recibimos y ante la falta de justicia la reacción es tomar justicia por mano propia. Volver a la época de los "cowboys", donde todos podemos defendernos y matar al agresor. En la antigüedad para equilibrar esta reacción y que no fuera mas violenta de la recibida surgió la ley del Talión. "ojo por ojo y diente por diente". Jesús nos dice que aún ante estas agresiones no hacer el mal. Como también por permisión era amar y hacer el bien al amigo pero desear y buscar el mal al enemigo, Jesús nos pide amar al enemigo y hacer el bien al que nos hace el mal. Como va contra los principios de nuestras inclinaciones, necesitamos una mirada y fuerza especial, una gracia de lo alto para dominar los movimientos instintivos. La ejemplaridad está en el mismo Dios que como Padre-Madre "hace salir el sol sobre buenos y malos y manda la lluvia sobre justos e injustos". Nadie puede reprochar a Dios dureza en sus decisiones porque su Bondad es infinita. El es todo Bien y Bondad. Nos pide ser perfectos como el mismo Padre Celestial. ¡Como cambiaría el mundo! si todos siguiéramos su proyecto de vida social, su deseo de un mundo mas humano y misericordioso. "Padre-Madre lleno de Bondad y Misericordia. ¡Que difícil es tener Tu Mirada y deseo del bien para con todos los hombres! Envía Tu Gracia para dominar nuestros instintos agresivos y poder responder haciendo el bien por el mal recibido".