Domingo XXVI. Durante el año (Mt.21,28-32).
En la imagen de ese Hombre – Padre de dos hijos refleja al mismo Dios revelado por Jesús como Abba - Padre. Dios como Padre no significa que es varón, Dios no tiene sexo, sino una imagen como se entendía en aquel entonces el activo de dar la vida, semillando en la mujer como pasiva. Hoy no es aceptable esa visión y no sería viable para identificar a Dios. Pero dejemos de lado la identidad sexual para detenernos y meditar lo que significaba la figura. En él Jesús pone a Dios como el dador de la vida a TODOS los hombres, varones y mujeres. Y en todos deposito vida, no hay distinción, a todos los asume como hijos e hijas. Su Amor es Creador, trasmite vida y está presente manteniéndolo vivo, si se apartara quedaría aniquilado. El mismo hace salir el sol sobre buenos y malos… dos hijos distintos, a los dos los ama y desea lo mejor, espera de ellos una respuesta generosa y responsable, representada en la Parábola de los Talentos. No espera de todos la misma respuesta, sino según los dones, talentos derramados de manera diferente, cada uno aporta al todo su parte como cada pieza de mosaico a la obra maestra terminada. Aquí no puede haber envidia, recelos, porque Dios no pedirá mas de lo que nos da, San Agustín rezaba a Dios: “Da lo que pides y pide lo que quieras”. El nos da la capacidad para obrar y servir al crecimiento de la humanidad. “NO TODOS SERVIMOS PARA TODO... PERO TODOS SERVIMOS PARA ALGO”.
Dos hijos nos representa a dos personas, varón o mujer, considerados como hijos/as, donde su Amor se ha manifestado, dándoles vida y proyecto o misión, un trabajo en la VIÑA… mundo...lugar donde El Creador los sembró. Los Cursillistas dirían: “en su metro cuadrado”, su cercanía, su entorno, en su medio de vida, sin esperar ir a otros mundos para desarrollar sus talentos. Las respuestas, libremente dadas, descubren a las personas hasta temperamentalmente. Uno con un perfil dócil y una aparente agilidad, entusiasmo, pronto a cumplir el mandato, pero que es superficial, inestable sin solidez a su SI, en su vida no refleja su compromiso. En nuestro ambiente también identificamos a ‘los Charlatanes’, grandilocuentes que hablan mucho, dan ordenes, mandan realizar y después dicen HICIMOS. Jesús relató esta Parábola mirando a los Sumos Sacerdote y Ancianos; Doctores de la Ley, conocedores de las Escrituras, llamados a guiar al Pueblo. Exigentes para con los demás en cumplir las Leyes, Normas, Mandatos …”cargando el peso sobre los fieles sin que ellos las cumplieran”, buscaban justificaciones para no realizarlos. Ellos respondieron ‘sí’ y no la hacen; los fieles condenados por el ‘no’ inicial, llevados a la reflexión, realizaron su misión en la VIÑA….Reino de Dios.
Este Evangelio busca valorar las ‘obras’ sobre las ‘palabras’ que no llegan nunca a cumplirse. Jesús lo decía a los Sumos Sacerdotes y Ancianos, Escribas y fariseos …”Les aseguro que los publicanos y las prostitutas llegan antes que ustedes al Reino de Dios”. Pero en la actualidad también caemos en esas contradicciones tanto en lo Religioso como en lo Político que antes de las votaciones prometen mucho, hablan tan lindo... con palabras medidas, estudiadas y dichas con aparente convicción; digo aparente convicción porque si estuvieran convencidos llevarían a cabo todo lo prometido. ‘LAS OBRAS, QUE HAS EDIFICADO EN TU VIDA, SERÁN LA HERENCIA DEJADA A LA HUMANIDAD’. El recuerdo de los grandes en la historia han dejaron sus huellas. A nosotros se nos pide edificar un mundo mas humano y feliz. La herencia dejada por Jesús está escrita en el ‘Proyecto de Vida’ reflejado en sus Obras y Palabras.
“Dios Bueno que revelaste en Tu Hijo como vivir Tu Proyecto Creador, envía Tu Espíritu para llevar adelante con generosidad un mundo mas armonioso, despertando en cada uno la diversidad de talentos que has derramado.”