Domingo 2° de Cuaresma. (Mc. 9,2-10).
Jesús en dos oportunidades lleva consigo a los Apóstoles Pedro, Santiago y Juan….en el Monte de la Trasfiguración y en el Huerto de los Olivos. En el primero Jesús deja traslucir su relación con el Padre Celestial, sus vestiduras se llenaron de luz y resplandor. Pedro fuera de si “¡Que bien estamos aquí!”, lleno de temor y emoción, no piensa en si mismo y sus necesidades sino darle a su Maestro y visitantes un lugar privilegiado. “Hagamos tres carpas, una para Ti otra para Moisés y otra para Elías”.
Esta es una imagen de cuando deseamos un camino con ESTABILIDAD, lleno de seguridad y gozo. En realidad la vida es una mezcla de buenos momentos con otros malos…. con errores o buenas decisiones. Hay que bajar del Monte a la realidad de la vida, con ideas claras, sencillas y practicables. La vida hay que vivirla según el Mensaje de quien allí salió puesto como verdadero Maestro.
San Ignacio de Loyola recordaba que cuando estamos en los buenos momentos, consolados, debemos saber que pasaran a otro de desolación, y cuando estamos en los malos momentos recordar que también se pasaran a los buenos. La experiencia de los buenos momentos es tan placentero que deseamos establecernos en ella y el tiempo pasa muy rápido… no así en los malos que cada minuto parece un infinito e infierno... Si medimos en tiempos reales nos daremos cuenta que los mejores momentos son mas largos pero se pasan tan gozosos que parecen cortos y los malos (dolor, persecución, condena, males de todo tipo) por mas que sean cortos en el tiempo provocan un estado tan triste y angustiante que pareciera que nunca se acaban. Los mismos Apóstoles, en el Huerto de los Olivos, reaccionaron de esa manera ...se quedaron dormidos y Jesús los reprende porque no eran capaces de acompañarlo ni una hora en su dolor y angustia. Habían estado tres años viendo los milagros y escuchando la sabiduría del Señor pero al ver a Jesús estremecido y sudar sangre no lo resistieron,
El tiempo de cuaresma es tiempo de reflexionar y medir también nuestras acciones según el pensamiento de Jesús y su Mensaje. Muchas veces nos dejamos guiar por modelos, programas y estilo de vida según otros patrones o guías. Subir al Monte no solos, ni tampoco con nuestro pensamiento y mentalidad ...ver allí a Jesús hablando, con los profetas en Elías y en las leyes con Moisés. desde SU VISIÓN Y ESTILO DE VIDA. La voz del Padre Celestial se deja oír y nos muestra la diferencia de ellos con Jesús, nos dice :”Este es Mi Hijo muy querido, escúchenlo”.
En la historia surgen muchos profetas y legisladores que en vez de ayudar a vivir “El Camino de Jesús” terminan oscureciendo o complicándolo. Se elaboran visones temerosas y caminos sinuosos y complicados de seguir. Surgen ‘Escuelas de Vida’.…’Maestros de Vida’… todos ellos ’cortados con la misma tijera’, imitándolo en el estilo, vestimenta y hablar’ de su maestro, sin identidad propia. Surge un cristianismo con leyes de temor y promesas oscuras del infierno al no cumplirlas. Se beatifica a esos modelos dejando de lado a Jesús y su simplicidad ...deseosos de seguridad de salvación y ser fieles cumplidores. Ese alguien termina desplazando al Verdadero Maestro. Los Santos son trasparencia de Jesús y no sus reemplazantes. Si Jesús no pudiera decir y mostrar todo lo que su Padre desea del hombre… no seria el Hijo de Dios….porque tendría tantas deficiencias que necesitaría de otro para dar a conocer el Proyecto del Padre, ya no seria el MODELO DE VIDA, sino uno mas.
Terminan siendo ‘profetas de la oscuridad’, catastróficas, con consecuencias funestas y fines del mundo; cuando en realidad debería ser un ENCUENTRO GOZOSO con JESUS y SU PADRE. El es el Hijo de Dios y no podemos compararlo con otros, aunque sean grandiosos, tomados como iluminados y visionarios. Jesús es revelado por el Padre como ...MI HIJO QUERIDO, ESCUCHÉNLO.
“Espíritu Santo envuélvenos en Tu Luz para que, en lo alto de nuestra relación con El Creador, encontremos el Verdadero Modelo de Vida para edificar un mundo mas humano y feliz”.
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