sábado, 27 de junio de 2020

”… MAS QUE A MI ...”

Domingo XIII Durante el año. (Mt. 10,37-42).
Jesús revela que el ser sus Discípulos Misioneros, del Proyecto de Vida del Padre Creador y de su Redención, conlleva vivir a contrapelo de los hombres del mundo, que solo piensan en beneficio particular, sin importar el mal que ocasione a otros, ni a la naturaleza que rodea. La Pandemia, en que vivimos hoy, esta ayudando a cambiar esos criterios siendo solidarios y hermanados; cuidándonos y cuidando, valorando mas el ser que el tener, despertando el espíritu de servicio generoso.
No todos entenderán el BIEN y BONDAD del Proyecto que el Maestro presenta, este también llevará a tener contradicciones y rechazo aún dentro de la familia. Jesús no desea separar los integrantes de una familia, ni llevar el odio y violencia dentro de ella. La división y el rechazo se debe a la no aceptación de los cambios de criterios del modo de vivir,  el rechazo del mensaje llevará a ser “signo de contradicción”. El vivir según el Plan Creador y Redentor resulta ser por si mismo, sin necesidad de predicación alguna, motivo de planteamiento de la conducta de los demás. En una oportunidad llegaron a Jesús su Madre y parientes deseando llevarlo a Nazaret porque lo consideraban fuera de los cabales. La renuncia a la familia y su modo de gobierno patriarcal, modo trivial de entonces, era renunciar a la seguridad que ella le daba y con la posibilidad de perder el patrimonio familiar que heredaba el primogénito.
Vivir en base al patrimonio era una seguridad de vida, Jesús abre el horizonte, educando un corazón mas amplio y generoso, la familia se agranda será toda la humanidad, con un Padre común. Entender esos criterios llevará a estimar y cuidar a todos los hombres como hermanos. En mi experiencia particular les debo a mis hermanos carnales, y no a la Institución aunque llamamos Madre, la seguridad de vida en las necesidades básicas para vivir; por ello no debo renunciar el lazo con ellos porque VIVEN EL PROYECTO DE JESÚS. La base de cercanía y atención, de las necesidades entre hermanos, la hemos recibido por la educación de nuestros padres. Por lo que la virtud no es abandonar la familia sino cuando esta nos separa de Jesús . El nos dice “Quien ama a su padre o a su madre … al hijo o hija MAS QUE A MI no es digno de mi”. El ‘MAS QUE’ se pone como el motivo que ocasiona la división e incomprensión.  Las malas interpretaciones y las exageradas posturas han dado a la Institución historias dramáticas, desde la separación temprana de los hijos con sus padres como ni el dar un beso a sus hermanas y madre, ni mirarle a los ojos, por ser mujeres y tener a la mujer como ocasión de pecado. Esto ha llevado también a las desviaciones que hoy se pone al descubierto. Nos decía Jesús (Mt.10,26): “No hay nada oculto que no deba ser revelado y nada secreto que no deba ser conocido”.
Vivir como Discípulos Misioneros de Jesús lleva a una identidad con El al extremo de “el que los recibe a ustedes, me recibe a mí y el que me recibe a mí recibe al que me envió”. Unidad y prolongación de las personas como de su Proyecto de Vida. Jesús se identifica con el Padre: ‘El que me ve también ve al Padre’. El que ve al Discípulo Misionero también ve a Jesús y con El al Padre. El AMOR es el que une y prolonga. El amor que el Maestro pone como el GRAN MANDAMIENTO, es el que llevará a la identidad, como ver en el necesitado el rostro sufriente del Señor, también será la recompensa que se recibirá. Amar y ser amado, aunque suene hermoso, bello y acepado por todos, NO ES FÁCIL, por eso Jesús pone también la cruz como identidad con El “el que no toma su cruz y me sigue no es digno de mí”. AMOR y SACRIFICO, 
“Jesús, Maestro de Vida, queremos ser tus Discípulos Misioneros pero reconocemos nuestras debilidades, limitaciones y defectos que impiden reflejar tu Rostro. Envía Tu Espíritu para amar y ser amado como nos enseñaste y diste ejemplo”.

domingo, 21 de junio de 2020

”NO TENGAN MIEDO …”

Domingo XII del Tiempo Ordinario. (Mt. 10, 26-33)
En varias oportunidades Jesús tuvo que alentar a los Apóstoles ante las revelaciones que les realizaba, que traerían persecución e incomprensión hasta el martirio, entregar la vida por el mensaje que les daba. Hoy insiste en NO TENER MIEDO, valemos mas que los pájaros del cielo. El Padre Celestial sabe lo que necesitamos, que estamos hechos de barro, frágiles, inconstantes, cortos para darnos a entender. No sabían ni se imaginaban como iban a enfrentarse contra el modo de pensar y guiarse en el mundo en que vivían. El Imperio Romano y las Autoridades Religiosas Judías imponían un modo de pensar y comportarse de sometimiento, con el castigo correspondiente al no realizarlo. 
El miedo al castigo por la condena o ante la conciencia presionada por sus faltas, por la ruptura de las Normas dadas, terminaban obnubilando la mente y anulando la acción de los discípulos, actuarían no por convencimiento del bien  en realizarlas sino en un sometimiento temeroso. Estaba en sus mentes recuerdos de crucifixión, flagelación, cárcel, condena lapidaria, hogueras y otras tantas crueldades que se han dado en la historia humana, tanto política como religiosa. Ante la mirada atenta del látigo o la cara fruncida y temerosa los niños se portan bien pero por temor, pasado este rompen la regla dada. Me trae el recuerdo del un obispo que deseando corregir a un sacerdote, que desilusionado de la Institución sintiéndose utilizado como material de descarte y terminando enamorado, le envía un decreto con la intimidación hasta comunicarle que “peligra tu salvación eterna”. Estos son los modos caducos de convencer y horrorosos del uso de la autoridad. Menos mal que Dios conoce lo profundo de cada corazón y Jesús nos pide no juzgar para no ser juzgado y condenado con la misma medida. 
El Maestro les dice que no deben temer a los hombres que matan el cuerpo pero NO A LOS IDEALES, no pueden matar la riqueza del mensaje que El les trasmitía, escuchado en la oscuridad o dado a pleno día. Este quedará a luz: EL PROYECTO DE VIDA PARA LA CONVIVENCIA pacifica y justa entre los hombres. Las Palabras de Jesús revelando un Dios, Padre Misericordioso, Padre de todos, formando una gran familia humana. Creados por un Amor puro y generoso, que ama como somos, deseando un mundo armonioso. Su cercanía con el pecador, enfermo, preso, discriminado y condenado por una sociedad inhumana, reveló que no vino a condenar sino a salvar, mostrándose como el Camino al Padre, que es Camino de Felicidad, de Paz y Vida. 
“Al que me reconozca abiertamente ante los hombres, Yo lo reconoceré ante mi Padre que está en el cielo”. Reconocerlo no es tener un conocimiento intelectual del mismo sino una VIDA DE RELACIÓN E IMITACIÓN. Dios Padre verá en cada uno de nosotros a su propio Hijo cuando tengamos un solo corazón con El. Eso es tener un reconocimiento ante el Padre, no cumplirlo será ser rechazado, porque no reconocerá la presencia de su Hijo en cada uno. Jesús, como el Nuevo Adán, es el modelo que el Creador desea del hombre, en lo que hubiera sido en el Paraíso... hoy Redimido. Por eso reconocerlo ante el Padre es ser un nuevo hombre. No detenernos en una simple adoración del Dios hecho Hombre, sino en un cumplimiento sereno y gozoso del Plan Redentor.
“Jesús, Maestro y Modelo del Plan Creador y Redentor, ayúdanos a edificar una humanidad justa y gozosa, llevando adelante la Misión de Tu Redención”.

sábado, 13 de junio de 2020

”YO SOY EL PAN DE VIDA”.

Domingo. Cuerpo y Sangre de Jesús.(Jn. 6,51-58).
Después que Jesús dio de comer a la multiplicación del pan multiplicado, lo buscaban hasta encontrarlo en la orilla del lago Tiberiades, en Cafarnaúm. El Maestro les reprocha que solo se acercan a El porque les dio de comer hasta saciarse y no por las enseñanzas que revelaba en esos signos. Les ofrece otra comida, un PAN DE VIDA, alimentarse de él saciaría para siempre y daría Vida Eterna. Ante esa propuesta despertaron el deseo de poseerlo como la Samaritana, en el pozo de Jacob, ante la oferta del AGUA VIVA, que también daría una saciedad perenne. 
Jesús pasa progresivamente del pan de cada día, que alimenta y sacia el hambre corporal, a una saciedad espiritual que siempre esta insatisfecha. Cuando le piden ese Pan, Jesús les responde “Yo soy el Pan de Vida. El que viene a mí jamás tenderá hambre, el que cree en mí jamás tendrá sed”. El Maestro ante la inquietud y cuestionamiento del pueblo, no desvía la solicitud sino que acentúa con mas firmeza la necesidad de comer ese pan. Pasara a identificar ese pan con su propio Cuerpo y Sangre. MAS ESCÁNDALO, el judío no concebía comer carne humana y menos de sangre, donde creían estar presente la vida .
Jesús acentúa la necesidad de alimentarse de Él: “El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna y lo resucitare en el ultimo día …. Permanece en mí y yo en el ...vivirá por mí  ..vivirá eternamente”. Llama a un alimento que une, una unidad que lleva a la identificación, de dos hacer uno. El Maestro llama a la COMUNIÓN con El. Hacerse uno, identificarse con El, prolongar su presencia entre los hombres. Decimos que lo más asume lo menos ...en la COMUNIÓN con su Cuerpo y Sangre es no hacer ese Pan una parte de nuestro cuerpo sino, por el contrario, nosotros somos asimilados en El. Estar en comunión con Jesús, es estar en El, asumir su mensaje, su proyecto, sus enseñanzas. No es buscar una identificación corporal, como algunos buscan vestirse de una manera o con el pelo largo y barba, despertando palabras de ‘se parece a Jesús’. Parecerse a Jesús es vivir el mensaje de vida que El trasmitió, su proyecto, que no es otro que la del Padre Celestial, el de la misma creación, un volver a Jesús es también un volver al ideal primigenio del Padre Creador. La ARMONÍA ORIGINAL. 
Comulgar con El es pensar, hablar, actuar como El lo haría en nuestro lugar, prolongarlo en el tiempo y espacio. Estar en comunión con Jesús no es necesariamente estarlo con una Institución, Grupo, Congregación, Secta, Movimiento Religioso; como estar en comunión con estas no es necesariamente estarlo con Jesús. Volver a Jesús es acercarlos para que realmente sean una comunión tan plena con El, que se pueda decir que sean lo mismo. ¡Cuantas guerras religiosas y cada uno en nombre de Jesús y la defensa a un modo de entenderlo!. Se elaboraron doctrinas, condenas mutuas, excomuniones …. ritos litúrgicos para vivir la Mesa del Señor y ¡que lejos estaría El de lo nuestro!. Seria muy duro que al final, en nuestro encuentro definitivo, nos diga “no los conozco”, aunque hayamos predicado en su nombre.
“Señor Jesús danos ese Pan de Vida que nos une a Ti y en Ti con nuestros hermanos. En comunión contigo cambiemos este mundo para que sea mas humana y feliz, edificando la Armonía original”.

domingo, 7 de junio de 2020

“AMAR A DIOS ES AMAR Y CUIDAR LO DADO POR EL”.

Domingo de la Santísima Trinidad. (Jn. 3,16-18).
Entre los discípulos de Jesús no todos tenían el mismo compromiso. En el Evangelio de este domingo nos encontramos con el diálogo de Jesús con Nicodemo, que veía de noche a verlo. Este reconoce que Jesús venía de Dios porque “nadie puede realizar los signos que tu hace si Dios no esta con Él”. Después de desarrollar el tema de que hay que nacer de nuevo y este del Espíritu, el Maestro le descubre un Dios distinto, no un Dios justiciero, que busca encontrar una pequeña debilidad o caída para castigar, ni tampoco condenar el mundo que en definitiva fue creado por El. En estos versículos nos dice “Sí, Dios amó tanto al mundo, que entrego a su Hijo único”, Todo fue creado por Su Amor y se mantiene por el mismo Amor Creador.
Tradicionalmente en la vida espiritual se consideraba tres enemigos del alma: Mundo, Demonio y Carne. El MUNDO no de la creación, sino del dinero y del poder, de la riqueza, cueste lo que cueste, sin importar como adquirirlos y el daño que pudiéramos darle a los demás hermanos. El materialismo y tecnicismo puestos como valores supremos por encima del propio hombre. Hoy con la cuarentena, por la pandemia, nos damos cuenta que más vale la vida propia y la de los demás, que también depende del cuidado personal. La vida sofisticada, el dinero y el poder quedo en segundo plano. La CARNE, no la del mercado para un buen asado criollo, sino las tendencias desordenadas del placer, la concupiscencia, sensualidad y desordenes sexuales ...el dejarse llevar por las pasiones desordenadas. El DEMONIO ser creado con libertad y quien eligió reemplazar a Dios su Creador. Jesús demostró la superioridad del Padre Creador expulsando los espíritus malignos de los posesos. No hay dos fuentes creadoras, el Bien y el Mal, Dios y el Demonio. Este último es un ser espiritual creado, por lo mismo le debe a Dios su existencia en el bien de existir, a pesar de haber elegido el mal camino, de ser: ODIO, ORGULLO,VANIDAD, SOBERBIA, EGOÍSMO, VIOLENCIA y MUERTE.
Todo lo que el Padre creo tiene la impronta de lo BUENO, por eso el decir que el mundo y la carne son enemigos del alma termina siendo palabras ambiguas. El Evangelio nos dice que “DIOS AMO EL MUNDO”, el génesis resaltó la bueno de esa acción creadora. El cuidado del propio cuerpo sin llegar al hedonismo, amor a si mismo y su belleza, no es malo. En la BELLEZA y BIEN también está la impronta creadora de Dios. El desprecio del propio cuerpo y castigarlo con mortificaciones, es tratar mal y romper un regalo que nos realizan, seria un desprecio al Creador. Hoy peligra el mal trato de la creación por abusos en el deseo de riquezas mal habidas y con destrozo de lo creado. El mundo esta en peligro y al mismo Papa Francisco se lo escucha hablar con frecuencia de la necesidad del cuidado de la “CASA COMÚN”, hasta publicar una Carta Apostólica. Jesús al redimir nos hace volver la mirada al Padre Creador y lo Bueno, Bello y Perfecto que dejó en su obra creadora. Jesús Salvador es entender que vino a mostrar el Camino para que la obra creadora del Padre se desarrolle en armonía, movida por el Espíritu Santo.
“Padre Creador, Hijo Redentor, Espíritu Santificador, Trinidad Santa, haznos tus adoradores de Verdad administrando el cuidado de los bienes que nos has dado. Que con sabiduría y generosidad sepamos proteger la naturaleza en beneficio de todos los hombres. Siendo nuestro Paraíso fortalécenos para no comer del árbol de la vida y destrozar la armonía creada y ocultarnos de Tu Plan Creador y del Proyecto de Vida que deseas para cada uno de nosotros.”