domingo, 26 de abril de 2020

“NOSOTROS ESPERÁBAMOS QUE…”.

3° Domingo de Pascua. (Lc. 24,13-35). 
El Evangelio de este Domingo nos relata la vuelta triste de los Discípulos de Emaús a su vida anterior, sin Jesús. La muerte del Maestro en la cruz fue un suceso que lleno de desolación y desesperanza a sus seguidores. ¿Qué esperaban de El?. Ellos mismos le confesarán al Peregrino sin nombre, quien sería el mismo Jesús: “nosotros esperábamos que fuera Él quien liberara a Israel…”. En épocas de crisis siempre esperamos a alguien que nos de la solución: un Mesías, un Libertador. Pero este según nuestros criterios y le ponemos cualidades y misión, pero ¡que desilusión! cuando no sucede de este modo y nos encontramos con otra realidad. De Jesús ¿Qué esperaban? y ¿Qué esperamos nosotros hoy?. 
El Pueblo judío sometido muchas veces a otros Reinos, necesitaron un David para ser liberados y tener su independencia. Surgieron los Macabeos, los Zelotes ...y con este espíritu se unieron algunos a Jesús, como Judas. ¿Cuál fue el mensaje de Jesús? ¿porque lo seguía tanta gente?.¿que encontraban en Él? ¿Que seducía y llenaba de Fuego los corazones? ¿Cuál era y ...es nuestra esperanza que suceda y realice ALGUIEN por nosotros?  Buscamos OTRO SISTEMA POSIBLE de vida: un mundo mas humano y feliz, mas justo y armonioso, mas equilibrado y pacífico. También ¿porque se desilusionaron de Él? ¿porque lo traicionó Judas?. No siempre los métodos que llevamos a cabo para vivir nuestros proyectos de vida son los de Jesús, y por lo mismo de Dios. Queremos una vida confortable sin pasar necesidades, llenamos nuestra vida de servicios y utilitarios, llenando el mundo de basura de lo que descartamos y volvemos a nuevas alternativas y seguimos adelante sin satisfacer nuestro corazón ansioso y absorberte por deseos de más. Creamos desequilibrios y esta desigualdad crea odio y violencia, buscando cambiar la realidad con métodos revolucionarios, violentos., terminamos siendo otros zelotes o macabeos, buscamos por las armas imponer nuestro modo de pensar y vivir.
VOLVER A JESÚS es encontrarse con El por el camino de la vida, como los discípulos de Emaús. Plantear la realidad no desde nuestro punto de vista “nosotros esperábamos que …” sino de lo que Dios Creador quiere para el bien de la humanidad, LO QUE EL ESPERA DE NOSOTROS.
En estos días de pandemia, nos es providencial para replantear nuestras vidas. Hoy no valoramos lo que tenemos, nuestros bienes materiales, ni de que raza somos, ni País, ni lengua, ni religión, sino lo que somos, la vida y las relaciones humanas que se van desprendiendo, la familia, los amigos, parientes, ancianos que mueren contagiados por el virus mortal. Volver a Jesús es plantearnos que hemos hecho para estar en esta lucha por la vida. ¿Cuanto nos hemos alejado de los planes de Dios Creador? ¡Escuchemos a Jesús! Su interpretación, su visión de la realidad, su PROYECTO DE VIDA. Jesús les fue dando la interpretación desde Dios sobre la realidad y los corazones de los discípulos empezaron a llenarse de una esperanza, alegría y paz “¿no ardía acaso nuestro corazón, mientras nos hablaba en el camino y nos explicaba las Escrituras?”. El dolor, el sufrimiento, no es deseo de Dios sino una realidad dura de la vida, que sin visión de fe nos lleva a la desesperación y al sin sentido de la vida. VOLVER A JESÚS, es entender la realidad desde Dios, revelado por Jesús. Un Dios Padre-Madre que desea la humanidad unida, equilibrada, armoniosa con la naturaleza que le rodea y un cuidado del uno por el otro como hermanos, sin discriminación, condena, ni grietas. Este era el mensaje que  apasionaba a la multitud que rodeaba al Maestro de Vida.
“Señor Jesús estando reunidos en Tu nombre deseamos reflexionar  sobre el Proyecto de Vida. Envía el Espíritu para entender nuestra realidad y cambiar nuestras costumbres para edificar un mundo mejor, según la Bondad de Nuestro Padre Celestial”.



sábado, 18 de abril de 2020

“MUÉSTRAME TU ROSTRO y VIVIRÉ POR TI y ...PARA TI”

2°Domingo de Resurrección. Divina Misericordia. (Jn. 20,19-31).
El Evangelio de Juan nos muestra la escena donde se aparece dos veces Jesús Resucitado a los Apóstoles. En la primera sin Tomás y la segunda estando presente él. 
El Evangelio revela un estado anímico de los Apóstoles: tenían MIEDO, vivían “encerrados por temor a los judíos”. Tener miedo si bien es un acto de defensa del hombre ante una situación que lo supera, puede ser proporcionada ante lo que lo provoca o desproporcionada, pero en ambos casos anula la acción del hombre, sin saber que hacer. El temor nubla la mirada impidiendo reconocer los tiempos en que se viven, paraliza la persona y provoca la cobardía, es incapaz de avanzar y cómo actuar frente a los sucesos que tenemos por delante. Estar encerrados nos lleva a vivir de los recuerdos y no de un mensaje de vida, un cómo vivir el proyecto que Jesús nos dejó en herencia y adaptándolo a los tiempos. Jesús “soplo sobre ellos” y trasmitió el Espíritu Santo … “como el Padre me envió a mí, Yo también los envío a ustedes” estarán encerrados hasta que el Espíritu descienda sobre ellos en Pentecostés, se abrirán las puertas y con valentía predicarán por todos lados el MENSAJE DE JESÚS. La Iglesia tiene que abrir las puertas y no vivir de los recuerdos. Atarse a las tradiciones en lo accidental, aquello que agregó el hombre por la aplicación de normas, dogmas, ritos y vestiduras, impide la acción del Espíritu para que el Mensaje de Jesús llegue a todos y en todos los tiempos. El peligro está en apagar la acción del Espíritu de Jesús. Abrirse al mundo no es ser mundano sino ver los signos de los tiempos, donde sopla el Espíritu, para poder llevar hoy el Mensaje de Jesús. Pasar de la condena y aislamiento a la mirada limpia y esperanzadora, descubriendo la acción de Dios y la presencia de su Hijo entre nosotros.
“Jesús se puso en medio de ellos” ...le trasmitió otro estado anímico “la Paz este con ustedes”. Allí donde estemos estará también la presencia de Jesús trasmitiendo PAZ. Esta experiencia de Jesús VIVO entre nosotros trasmite paz, nos da seguridad y valentía, también alegría y ese brotar el amor en el servicio, que la gente descubría en los primeros cristianos. En sus apariciones Jesús trasmitía la paz repetidamente y anunciaba que estaría con nosotros hasta el fin. El Mensaje de Jesús ...Su Proyecto de Vida ...un mundo mas humano y feliz ...mas justo y misericordioso, no se acabó en la cruz, con la muerte del Maestro, sino debe llegar a la plenitud al final de los tiempos. NOSOTROS SOMOS SUS ENVIADOS. 
Para muchos pensadores modernos ese “volver a Galilea”, que Jesús les pide y donde lo encontrarán, es volver al principio de Su misión y desde su Resurrección entender, anunciar y vivir el Mensajes de Vida, que El les trasmitió. Estar cercano del necesitado, descubrir su rostro en ellos “¿Cuando te vimos y asistimos?” ...“lo que haces a uno de estos pequeños a mi me lo haces”… estar cercano del que sufre, enfermo, preso, pecador, necesitado ...que el Reino de Dios está ente nosotros, un Reino de Amor, Justicia, Paz, Gozo, felicidad y Vida. 
“Señor ¡ábreme los ojos! Para descubrir Tu presencia entre nosotros y la acción del Espíritu transmitiéndonos, alegría y espíritu de servicio en aquellos que Tu te has identificado”.

sábado, 11 de abril de 2020

“SOY LA VIDA Y RESURRECCIÓN”

Domingo de Resurrección. (Mt. 28,1ss). 
En los cuatro evangelistas aparece en primer plano la aparición de Jesús Resucitado a las mujeres, la mas nombrada María Magdalena. Mujeres que no tienen miedo a los soldados que custodian el sepulcro, pero que ese amor por su Maestro tampoco miden la realidad: “¿como moveremos la piedra que sella el sepulcro?”. Un amor humano muy grande, generoso y audaz. A este amor, respuesta al ofrecido por su Maestro, le faltaba la fuerza de la FE, buscaban untar el cadáver de Jesús, perfumarlo... y ¡encuentran el sepulcro vacío! El primer pensamiento fue “¡robaron el cuerpo del Maestro!”. Fueron consoladas por unos ángeles y también por su Maestro, en un aparición llena de luz.
¿Como era esa presencia? ¿fue fácil reconocerlo? O ¿necesitaban ser iluminadas? Los Apóstoles dudaron de lo que ellas les revelaban ¿Quién podía aceptar lo que revelaban estas pobres mujeres llenas de tristeza y de recuerdos, que les harían imposible aceptar la muerte de alguien tan amado? Era un echo que no se quería aceptar, buscaban alguna salida de la realidad: SU MAESTRO HABÍA MUERTO, ellas habían estado presentes al pie de la cruz. y ¿AHORA LO VEN RESUCITADO? ¡Están borrachas, la tristeza les hace decir y ver imaginaciones!. Las dudas nos dan la certeza de la Resurrección, nadie mostraría la debilidad y falta de fe en creer, todos nos sentimos superhombres y supermujeres, mostramos lo mejor de cada uno, vendemos nuestro producto. La Resurrección es una verdad que requiere esa EXPERIENCIA PERSONAL. 
Nuestra fe en Jesús Resucitado ¿en que se apoya y alimenta? ¿En la simple y audaz trasmisión de generación en generación del recuerdo revelado por aquellos primeros seguidores de Jesús? ¡Es verdad! pero ¿donde lo encontramos hoy vivo entre nosotros? ¿Como experimentamos el encuentro con El hoy? Esa verdad fue cuestionada también de generación en generación saliendo de ella por una declaración extraordinaria de los Apóstoles redactando el “CREDO”. Pero también esto a llevado a que nuestra fe se depositó y descansa en un ARTICULO de fe y no en una REALIDAD de fe. Hemos desarrollado los artículos de fe, rezándolo en el Credo permanentemente, pero nuestra Fe se ha alimentado y expresado en un relato desarrollado cuidadosamente por expertos teólogos. La necesidad de buscar un entendimiento de lo espiritual llevó a desarrollar el DOGMA, verdades redactados por los hombres, con el peligro de alejarnos de la experiencia personal con esas verdades de fe. De niños, en el catecismo, nos hacían aprender de memoria las preguntas y respuestas de fe, sin llevarnos al encuentro de ese Jesús Resucitado.
El Apocalipsis nos dice: “Estuve muerto pero ahora vivo para siempre y tengo la llave de la Muerte y del Abismo” (1,17). Jesús está VIVO. Su resurrección no es un revivir a esta vida como la nuestra, para volver a tener las necesidades humanas ...comer, descansar, crecer, envejecer, sufrir, morir ...El esta en la PLENITUD DE VIDA, esta en Dios eternamente con su cuerpo. Pero este ¿como? Un cuerpo Glorioso, distinto al nuestro. Traspasaba las puestas cerradas, aparecía y desaparecía, estaba en un lugar y en otro sin necesidad del tiempo para trasladarse … Con un modo de ser que llegaba a encubrir su rostro, como a los Discípulos de Emaús. Para el judío el cuerpo representaba toda la persona como esta en este mundo de relaciones y vivencias, conflictos, heridas, alegrías y tristezas. No sería un cuerpo físico como el nuestro, sino Glorioso, que manifiesta una plenitud de ser. El Apocalipsis nos recuerda “Yo haré nueva todas las cosas” (21,5).
“Señor Jesús, Tu presencia entre nosotros requiere esa luz dada a las mujeres ante el sepulcro vacío. Tu presencia, con nuevos rostros, estas presente en nuestros hermanos necesitados. Llénanos de la alegría de encontrarte”

“¡MADRE ENSÉÑAME A SER BUEN HIJO!”.

Sábado Santo. (Jn.19, 25-27). 
“Junto a la cruz de Jesús estaba su Madre...” Desde allí El Señor la entrega al Discípulo que más amaba y desde aquel entonces la llevó consigo. La fortaleza de ese Hijo que envuelto en el dolor no se olvida de su Madre y quien velaría por ella en su ausencia. Tener devoción a Ella es estar considerado como DISCÍPULO AMADO, es la debilidad del Corazón de Jesús. 
Al pie de la cruz depositan el cuerpo sin vida de Jesús en los brazos de su Madre. ¡Que misterio tan grande! El Señor de la Vida descansa en los brazos de Aquella que es “bendita entre todas las mujeres… Feliz de Ti por haber creído ...” (Lc.1,42ss).Aquella que era alabada por darle de amamantar a ese Hijo, ahora sin vida en sus brazos. 
Ese Hijo fue depositado en un sepulcro nuevo ...le arrebatan de sus manos el cuerpo bendito de su vientre. Ni esa presencia corporal ya no la tiene. No puede consolar el dolor de su Hijo ni limpiar ese cuerpo desfigurado. Sola con la mirada en el más allá, con esperanza y CONSERVANDO TODO EN SU CORAZÓN, aquello que humanamente no tiene sentido, esperando una respuesta comprensible a tanto dolor. Cuando busqué consolar a mi madre, ante el dolor de la muerte de su hijo accidentado, ella con esa sabiduría de vida, manifestando su desolación, me comunica su sentimiento diciéndome: “una madre no esta preparada para ver morir a un hijo, la ley de la vida es al revés ...un hijo ve morir a sus padres”. En ese momento comprendí el dolor de María, Madre del Señor. El dolor de mi madre me llevó a profundizar y entender mas el dolor de la Madre de Jesús. ¡Quien puede consolar ese dolor! Solo el silencio y cercanía, un abrazo sentido. La empatía que nos une en un solo corazón.
“Madre hoy me dirijo a Ti y no a Tu Hijo Jesús, mi Señor… Hermano y Amigo. Permíteme dirigirme como un hijo necesitado cuando en realidad esperas la comprensión de Tu dolor y el deseo de que aceptemos el proyecto de vida de Aquel que pasó su Vida haciendo el Bien. Hazme ser buen hijo Tuyo y discípulo de Tu Hijo”.

viernes, 10 de abril de 2020

“VENGA A NOSOTROS TU REINO”

Viernes Santo. (Mt.26, 36ss: Oración de Jesús en el Huerto, arresto, ante el Sanedrín. 27,1ss Ante Pilato, coronación, crucifixión y muerte). 
La noche y la mañana hasta las tres de la tarde son los momentos mas trágicos, intensos y dolorosos de Jesús. Nos es conocida y meditada constantemente, recorriendo el VÍA CRUCIS (representación piadosa de los sucesos). 
En el Huerto reflexionamos la humanidad de Jesús adelantando su sufrimiento hasta el deseo de apartar el “cáliz del dolor”. La experiencia del terror de su futuro lo llevó a la de tristeza hasta la muerte, agonía, tedio, al sudor de sangre; experiencia de una muerte previa y prolongado en el tiempo.
La detención por la fuerza de seguridad del Templo, junto con la traición de Judas, el abandono de sus Apóstoles y la negación de Pedro ...sumó una SOLEDAD incalculable.
El juicio realizado en la oscuridad de la noche, realizado por el Consejo de Caifás, expresa el deseo de ocultamiento de un acto totalmente injusto. La condena le viene por cuestionar el Sistema del Templo, del comportamiento de las Autoridades Religiosas. Ante ellos se presenta como el Mesías e Hijo de Dios, temas suficientes para ser considerado reo de muerte, que las leyes romanas se reservaba realizarlos. CONDENADO POR LA RELIGIÓN. Su mensaje sacudía el comportamiento existente de aquellos que debían ser ejemplares, era la aristocracia sacerdotal, acomodados económicamente. Estos estaban sometidos y condicionados por el Imperio Romano, amigos del PODER.
Presentado ante Pilato, amigo de Caifás, quien justificará la condena a muerte presionado al considerar al Cesar como único Rey. Pilato aprovechará para terminar con el deseo del Pueblo judío del deseo de su Rey , poniendo en tres idiomas el cartel de condena “Jesús Nazareno Rey de los Judíos” (INRI). CONDENADO POR EL PODER POLÍTICO, Condenado a la crucifixión, castigo máximo dado a los  peores reos existentes y ejemplaridad para no imitarlos. No nos detendremos en el horroroso método persuasivo, ya conocido y meditado. Solo recordar el motivo de su aplicación en Jesús: un fanático y revolucionario social, que llama a todos ser hermanos de un mismo Padre Celestial, a quien llama ABBA, Padre. Que es Amor-Misericordioso, cercano a los pecadores, enfermos, pobres y necesitados. Su mensaje y estilo de vida era revolucionario, era el Príncipe de la Paz. Revolucionario por predicar el AMOR como motivo mas elevado de la acción del hombre a imitación de Dios. No hay armas ni violencia, llama a ofrecer la otra mejilla, caminar junto al que lo necesita trayectos largos, dar sin esperar recompensa, identificado con aquellos sobre los cuales se realiza las obras de misericordia ...  A este proyecto de humanización y felicidad para todos los hombres lo llamaba REINO DE DIOS.
“Señor Jesús, tu proyecto de vida en bien de todos los hombres nos ha llevado a crucificarte por nuestros egoísmos, vanidades, orgullos y ambiciones. Mirándote en Tu soledad e incomprendido ayúdanos a ser generosos y constantes en edificar un mundo mejor”.

jueves, 9 de abril de 2020

“EL QUE NO VIVE PARA SERVIR, NO SIRVE PARA VIVIR”.

Jueves Santo.(Mt. 26, 17—-29). 
Jesús manda a sus Apóstoles preparar la Cena Pascual Judía. Esta era el recuerdo del Paso del Ángel Exterminador en Egipto, donde morían todos los hijos primogénitos. Pasaba de largo las casas marcadas con la sangre del cordero en los dinteles de las puertas. Jesús será, en adelante, ese cordero Pascual y somos nosotros los marcados con Su Sangre Preciosa y la muerte eterna no nos vencerá.
Los Jueves Santos nos recuerda dos temas importantes: Jesús se nos hace presente en el Pan y Vino ”Tomen y coman, esto es Mi Cuerpo ...Beban todos de ella, porque esa es Mi Sangre, la Sangre de la Alianza que se derrama por muchos para la remisión de los pecados”. El segundo tema que nos revela es el SERVICIO. El lavado de los pies nos lo relata Juan en su Evangelio: “¿Comprenden lo que acabo de hacer con ustedes? Ustedes me llaman Maestro y Señor, y tienen razón , porque lo soy…Ustedes también deben lavarse los pies unos a otros. Les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que YO hice con ustedes. Les aseguro que el servidor no es más grande que su señor, ni el enviado más grande que el que lo envía”.
Jesús en el Pan y Vino, entregado como alimento a los demás, es trasmisión de VIDA y esta de DIOS. “El que come Mi carne y bebe Mi sangre tiene vida eterna y Yo lo resucitaré en el último día (Jn.6,54)”. Comer su carne y beber su sangre es alimentarse de su SER. Tener una participación de su Ser es prolongar su existencia en el mundo: SER OTRO JESÚS. Su espíritu de ser comido y necesitado para servir a los demás. Los jueves Santos nos queda el lavado de los pies y no lo que representa.: EL ESPIRITU DE SERVICIO. Ser grande es no ser servido y poseer riqueza para que los demás nos sirvan, sino tener talentos, dados por Dios, para edificar un mundo mas humano y feliz para TODOS. Estos días de Pandemia llegamos a valorar aquellos que realizan un servicio de vocación con los hermanos necesitados. En el aislamiento obligatorio y  dejando de lado valores que el mundo nos presentaban como necesarios, ahora entendemos que lo mas importante es la VIDA. Miramos y valoramos a todos aquellos que hacen posible su cuidado ...eso es lavar los pies que Jesús nos llama a realizar. 
Hoy miramos y valoramos aquellos que antes pasaban sin ser considerados o eran cuestionados …se valoraba al que poseía riqueza  … encontramos que con ello no puede prolongar su vida. La Pandemia nos pone a todos en un mismo nivel y encontramos valores en aquellos que sirven generosamente y hasta exponerse al contagio.
“Señor Jesús, Tu has sembrado talentos y valores en cada uno de nosotros para ser administradores de esos bienes en servicio de los demás ...haznos generosos en compartirlos”.

domingo, 5 de abril de 2020

”CAMINEMOS EN JESÚS”

Domingo de Ramos. (Entrada: Mt. 21,1-10. Expulsión de mercaderes en el Templo: Mt. 21, 12-17).
El Domingo de Ramos nos es conocida y prolongada en el año por el Racimo de Olivo bendecido. Lo llevamos a nuestras casas como un amuleto protector de un año para el otro. Necesitamos signos sensibles que nos den la tranquilidad y seguridad como cuando nos lanzamos al mar con salvavidas. Pero este signo termina siendo mas importante y deseado que aquello que busca representar. Los Domingo de Ramos se llena de fieles mas que el Domingo de Pascua de Resurrección o que el Viernes Santo, donde recordamos el Amor de Dios Padre-Madre que en el Hijo Crucificado manifiesta su Amor Extremo. 
El DOMINGO DE RAMOS es el recuerdo de la última entrada de Jesús a Jerusalén. Primer día de la Semana Santa. Desde este día miramos la semana como un TODO: la entrada, expulsión de mercaderes, Última Cena, oración en el Huerto de los Olivos, traición de Judas, Juicio Religioso y  Político, condena, flagelación y coronación de espinas, crucifixión y MUERTE, sepultura, soledad de María, RESURRECCIÓN DE JESÚS. Es toda la historia del Dios hecho hombre en su manifestación de su Amor Misericordioso. Mientras que el hombre camina por un sendero distinto, Jesús muestra en Su Camino el sentido mas profundo del valor del hombre para Dios. Camina callado e incomprendido, sin reproches de la inconstancia y falta de entendimiento. Mientras todos gritan triunfalistas, modos humanos de ganar, poseer y derrotar al enemigo ...Jesús camina con un corazón generosos y solitario. Todos alegres  ...Jesús triste y doloroso.
¡Cuanta incomprensión a Dios y su Proyecto de vida para con el hombre! En la entrada a Jerusalén se expresa una entrada triunfal. Gritos de Hosanna … Bendito el que viene  ..! Gritos de alegría, posaban sus mantos en el suelo para que el asno que llevaba a Jesús lo pisara. Semejante actitud hacemos para con los ídolos del mundo, que algo toque de esa persona, nos hace remontar las alturas. Lo guardamos como un recuerdo imborrable. Jesús no rechaza las expresiones piadosas pero también sabe que esas mismas personas ante Pilato, el poder imperial, gritarán ¡Crucifícalo!
Mientras que el pueblo ovacionaban a Jesús, como el púgil que va a subir al cuadrilátero, El sabe lo que le espera ...el abandono, soledad y martirio. Me viene el recuerdo, en estos días, a los ciudadanos ovacionando a los generosos y sacrificados que se exponen al peligro del contagio del virus. Otros buscan echarlos de sus edificios, por miedo al contagio… Unos elogian otros condenan. Jesús experimentó las alabanzas y gratitudes  ...pero también el abandono y condena. Los suyos en esta entrada triunfal estarían llenos de emoción y arrebatos de generosidad, pero serán los mismos que lo abandonan en la persecución y cruz.
Todos esperaban que fuera el Liberador del Imperio Romano, se dirigiera al Palacio de Herodes o de Pilato y los destronara como un nuevo David, su Rey. NO! Fue al Templo. Allí manifestó una violencia inusitada, hizo un látigo, con furia tiró las mercaderías, venta de palomas y otros  que eran necesario para los sacrificios, facilitando su obtención a los fieles venidos en peregrinación.”Mi Casa será llamada casa de oración, pero ustedes la han convertido en una cueva de ladrones”. ¿Como reaccionaría Jesús hoy día ...ante nuestras prioridades pastorales ...nuestras dedicaciones primarias? La pandemia nos está cuestionando y llevando a lo esencial como el látigo de Jesús, echando del Templo a los mercaderes. Están resurgiendo nuevos vientos! ... nueva época? Hay un despertar, un nuevo espíritu, el encierro llevó a la reflexión y entender lo que mucho nos ocupaba y preocupaba no era lo esencial. La simplicidad y desprendimiento nos lleva a edificar un mundo mas humano y feliz. UN FUTURO NUEVO.
“Señor Jesús ilumínanos en estos momentos difíciles para ser generosos y solidarios con nuestros hermanos. Ya no hay raza, ni sexo, ni estado social que nos diferencie ante la muerte. Tu eres la resurrección y la Vida. Toda la humanidad ve en Ti el reflejo del Amor Misericordioso de Tu Padre. GRACIAS por revelarte”.